Interactividad. Interactividad digital o multimedia.
Hoy os traigo un término que, (por lo menos mi generación), conocemos, con el que convivimos.
A diario compartimos enlaces, post, mandamos chats, consultamos información en páginas de otros o quizás llamamos por Skype a familiares lejanos. Hemos nacido sabiendo relacionarnos en formatos digitales, pero… alguno sabría concretar en qué consiste este término? Antes de leer de qué se trata, dediquemos un minuto a reflexionar sobre cómo utilizamos la interactividad digital en nuestro día a día con este pequeño vídeo.
José Luis Orihuela, presentado por él mismo como profesor universitario, conferenciante y bloguer, define la interactividad (en el ámbito digital) como la capacidad de los dispositivos que el usuario es capaz de actualizar o ejecutar en la medida en que inicia acciones que generan una respuesta por parte del sistema o de otros usuarios. Siguiendo con algunas declaraciones de este entendido digital (y aprovechando para llevarlo a mi terreno), la publicidad es un modo de comunicación que se ha caracterizado por explotar de maneras creativas las posibilidades de cada nuevo medio. Tiene la capacidad de llevar lenguajes y formatos hasta fronteras que nunca antes se había planteado nadie. En este sentido, la Publicidad es el gran laboratorio de las mejores innovaciones en comunicación.
Complicado? Hablemos un poco más sobre esto tan difuso que conocemos tan bien.
Con esta definición podríamos decir, acertadamente, que la interactividad ideal es la conversación. Es un un «diálogo» entre el usuario y el objeto de aprendizaje (el ordenador o medio del que nos sirvamos), y como toda conversación puede ser unidireccional, bidireccional o multidireccional.
Todos nos consideramos unos bilingües interactivos en términos digitales, pero la verdad es que existen niveles de interactividad en función de cómo la utilicemos.
Un primer nivel bajo, entrar en programas para consultar algo, cómo cuando vamos al cajero a sacar dinero; un nivel medio, hacer un recorrido por los contenidos y tener la capacidad de seleccionar a qué acceder y cuándo, como cuando buscamos qué canción queremos escuchar en Spotify; y por último, para los más expertos, un nivel alto, acceder a esos contenidos desde diferentes puntos de vista, como cuando podemos verlos en 3D.
Yo ya me considero una entendida de la interactividad. Y tú? Eres realmente un experto de la interactividad o aún tienes cosas que aprender??
Alba Perujo 